¿Las duchas frías son para verdaderos vikingos? ¿Estás bromeando? ¡Hablas en serio cuando dices eso! La termogénesis en frío es el nombre de la nueva tendencia que te hace estar más alerta, en forma y más delgado. En este artículo aprenderá cómo puede utilizar la termogénesis para obtener más energía, una regeneración más rápida y un sistema inmunológico mejorado.
Tienes que estar bastante loco para saltar al agua helada. Lo que antes se practicaba exclusivamente en el extremo norte de Escandinavia y Rusia, ahora encuentra cada vez más adeptos en este país. Estamos hablando de termogénesis en frío, que en realidad no es para los débiles de corazón. Las duchas y baños fríos no solo estimulan la circulación y la quema de grasa, sino que también fortalecen su sistema inmunológico.
Termogénesis en frío: ¿qué es realmente?
Mucha gente conoce la sensación de levantarse por la mañana y no haber dormido lo suficiente. ¡Lo único que ayuda es una ducha fría! La sola idea de pararse bajo un chorro de agua helada te hace sudar de miedo en la frente. La termogénesis en frío no es tan mala, pero esta tendencia definitivamente tiene algo que ver con el agua fría. Muchas personas intransigentes se sumergen en un recipiente lleno de agua helada o cubitos de hielo; para otros, una ducha fría es suficiente. Pero, ¿qué es lo que realmente impulsa a las personas a asustar sus cuerpos de esa manera? La respuesta es simple: es la sensación de frescura y salud lo que es francamente adictivo. Pruébelo y disfrute de su frescura personal hoy mismo.
Fresco en el día: cómo aprovechar mejor la termogénesis en frío
Las duchas calientes tienen que tener los nervios tan duros como el acero para convertirse en verdaderas duchas frías. No se preocupe, la termogénesis fría no es tan mala, pero se necesita un poco de esfuerzo para estar bajo la ducha fría por la mañana.
Saltar a una piscina de agua fría es en realidad para los más acérrimos. Si comienza con termogénesis en frío, también puede elegir una variante menos impactante bajando lentamente la temperatura del agua. Eso suena bastante banal al principio, pero podrás sentir la diferencia si practicas este método por más tiempo. Aquellos a quienes les gusta tomar una ducha tibia percibirán el agua con una temperatura de veinte grados como fría. Para que tu cuerpo no sufra un golpe de frío, debes acercarte lentamente a la ducha fría de la mañana.
Si desea más, puede comenzar a alternar las duchas cambiando la temperatura del agua cada diez o veinte segundos. Primero, tome una ducha tibia antes de sacudir su cuerpo con chorros de agua helada. Con esta técnica no solo estimula su circulación, sino que también fortalece su sistema inmunológico. Dado que los vasos sanguíneos se expanden y contraen repentinamente, también previene enfermedades vasculares y cardiovasculares. Una vez que su cuerpo se haya acostumbrado al agua fría, podrá experimentar el poder de la ducha fría todos los días.
La termogénesis en frío como potenciador natural del estado de ánimo
¡El agua fría levanta el ánimo! Tan pronto como tomes una ducha fría, tu corazón comienza a latir más rápido. Lo que inicialmente requiere un poco de esfuerzo se siente realmente bien después. Esto se debe a la hormona norepinefrina, que aumenta la frecuencia cardíaca y la presión arterial. La norepinefrina hace que su motor interior vibre para que pueda comenzar su día con fuerza. Además, su cuerpo libera endorfinas, que también se conocen como hormonas de la felicidad, bajo la ducha fría. Por lo tanto, una ducha fría no solo proporciona más potencia, sino que también te pone de buen humor.
El agua fría temprano en la mañana estimula la quema de grasa.
Que la termogénesis fría aumente la quema de grasa suena paradójico al principio. Sin embargo, los estudios muestran que las temperaturas frías realmente te hacen delgado. Por lo tanto, si toma una ducha fría con más frecuencia, estará haciendo algo por su línea delgada a largo plazo.
Nuestros cuerpos están formados por células grasas blancas y marrones que realizan diferentes tareas. No todas las grasas son iguales. Los glóbulos blancos constituyen la mayor proporción del cuerpo humano. Se utilizan principalmente para almacenar energía, por lo que también son responsables de la obesidad. Las células de grasa marrón, por otro lado, no almacenan la energía, la liberan en forma de calor. En principio, son comparables a los hornos: cuanto más fría es la temperatura exterior, más energía (grasa) tienen que consumir para mantener constante la temperatura corporal. Las células grasas blancas pueden incluso convertirse en células grasas marrones para proporcionar más calor y proteger al cuerpo de la muerte por frío.
Sin embargo, esto solo sucede cuando tomas un baño de hielo. Con un baño de hielo, la temperatura corporal desciende rápidamente en muy poco tiempo. Su cuerpo intenta mantener la temperatura constante estimulando las células de grasa marrón para que liberen energía. Si eso no es suficiente, los glóbulos blancos se queman para obtener más energía. Sin embargo, no podrá lograr este efecto con una ducha fría ocasional. El agua no está muy fría para enfriar el cuerpo lo más rápido posible. Sin embargo, una ducha fría siempre es suficiente para endurecerlos.
Por cierto: si quieres adelgazar en un baño de hielo, debes utilizar este método con regularidad. Una aplicación no es suficiente para quemar grasa a largo plazo.
Aptitud física y mental gracias a la termogénesis
Los atletas profesionales lideran el camino cuando se regeneran en el baño de hielo después de una dura sesión de entrenamiento o competencia. La terapia con agua fría se utiliza para una recuperación más rápida de los músculos estresados a fin de prevenir los molestos dolores musculares. Se sentirá significativamente más en forma y más productivo después de un baño de hielo. Si el baño de hielo es demasiado extremo para ti, puedes quedarte con una ducha fría.
La termogénesis en frío tiene un efecto más positivo: fortalece el sistema inmunológico. ¿Por qué? Porque el efecto del frío moviliza más glóbulos blancos, que su cuerpo necesita para combatir virus y bacterias.
Conclusión
El agua fría aumenta el bienestar físico y mental, pero la ducha matutina no debería doler. En lugar de iniciar la termogénesis en frío de manera extrema, debe bajar lentamente la temperatura del agua para no golpear su cuerpo innecesariamente. Qué tan fría esté el agua en última instancia, depende de usted. La ducha fría siempre tiene un efecto positivo.